Bien es conocida la organización
jerárquica de nuestros antepasados. Tanto si hablamos de Celtas, Celtíberos o
Iberos, las diferencias no eran enormes en cuanto a la organización social.
Entre Celtas y Celtíberos era costumbre elegir a su jefe, por el contrario,
entre los Íberos la forma era clientelar, es decir, tanto más poderoso era
alguien cuantas más personas tenía a su cargo merced al arriendo de ganado o
tierras. Lo que es indiscutible es que, en nuestras sociedades, al igual que en
el resto de la época, cada tribu o poblado tenía una figura de autoridad. Esta
autoridad era compartida por igual entre hombres y mujeres.
En Culto Ibero hemos querido
trasponer esas antiguas costumbres a nuestra moderna organización. La siguiente
norma, conocida como Norma de las Casas de Iberia, es el texto en el que se
recoge una de nuestras más antiguas tradiciones sociales, adaptada a nuestros tiempos. Se trata del reconocimiento a la primera persona que acceda al sacerdocio en su comunidad mediante el otorgamiento del título de Baitir.
NORMA DE LAS CASAS DE
IBERIA
Como quiera que
nuestros antepasados,
Para organizar
su comunidad
Elegían entre
ellos a un “primus inter pares”
Teniendo en
cuenta de Iberia, sus lares,
Opida, tribu o
ciudad
Con esta Norma
los honramos.
Elisices,
sordones y ceretanos,
airenosinos, andosinos
y bergistanos,
ausetanos,
indigetes y castelanos,
lacetanos,
layetanos y cossetanos,
ilergetas,
iacetanos y suessetanos,
sedetanos,
ilercavones y edetanos,
contestanos,
oretanos y bastetanos
sin olvidar al
noble pueblo turdetano,
De toda tribu de
los Iberos se tomará
El primer
sacerdote consagrado
Con honores será
nombrado
Baitir de su
gente y comunidad.
Arévacos, Belos
y Pelendones,
Lusones, Titos y
Lobetanos,
Junto a
Carpetanos y Berones,
Tribus
Celtíberas, mis hermanos
Serán nombrados
Baitires
En las mismas
condiciones.
De los Celtas, y
con honores,
Célticos,
Lusitanos y Vettones,
Calaicos,
Vacceos y Astures,
Cántabros,
Turmódigos y Vascones,
Várdulos,
Caristios y Autrigones,
Sea para ellos
el buen vivir
Que esta Norma
les alcance,
Y que tengan sin
percance
De la misma
condición su Baitir.
De los pueblos
no nombrados
Confíen en su
porvenir
Que jamás serán
olvidados
Y justamente
tendrán su Baitir.
De tan noble
título y heredad
Será de nuevo
grande nuestra tierra
Nuestros Dioses
volverán a su lugar
Pues crecen sus
hijos sin cesar
Y tanto en la
paz como en la guerra
Los honraremos
con tenacidad.
De Iberia todas
las Grandes Casas
Su Baitir en
representación tendrán,
Manteniendo vivo
el Sagrado Fuego
De impíos temor
y desasosiego
Pues por su honor
sabrán
Conservar de
nuestra fe las brasas.
Por los Dioses de Iberia, que así sea.
Por mi mano aiTn anaBiEr
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Cualquier persona es libre de comentar. Si los comentarios son ofensivos o inadecuados, serán eliminados por los administradores.
Gracias por participar.